Estos dos estudiantes negros están detenidos por pegarse entre ellos. Uno de ellos es un chico malo al que no le importa nada y se pasa el día siendo el matón del campus. Tiene demasiada confianza en sí mismo. El otro es un chico pequeño y tímido. Solos en la sala de detención, ajustan sus cuentas, esta vez con sus pollas. Y el tímido tiene la mercancía. Una vara de locura con un aguijón divino al que el chico malo no puede resistirse. No puede aguantar más con esa polla loca en la boca. Y va a aprenderlo siendo sodomizado sin descanso.